La pandemia obligó a los gobierno de la provincia de Buenos Aires a priorizar la inversión en salud. Tras años de deterioro, el distrito lleva más de $22 mil millones invertidos en equipamiento, mejoras al personal y nuevas edificaciones.
A seis meses de haberse anunciado el aislamiento social, preventivo y obligatorio, el gobierno bonaerense lleva $22.416.697.500 invertidos en insumos médicos, equipamiento para los hospitales y mejoras salariales para los y las trabajadores de la salud.

En las últimas tres semanas los contagios por coronavirus parecerían haberse estabilizado en lo que el gobernador Axel Kicillof definió como “un altiplano” ya que “es una cifra alta”. Además remarcó que “el virus se sigue expandiendo pero nos agarra indudablemente cansados. Es una amenaza que avanza y nosotros no tenemos que aflojar”.
Coronavirus: ¿cómo invirtió la provincia?
Kicillof remarcó que “fueron seis meses muy duros”, pero que se pudo hacer mucho, porque se trabajó “colectivamente con todos los dirigentes de las distintas fuerzas”. Dentro de lo hecho en este lapso de tiempo, el abastecimiento de suministros básicos y la expansión del sistema sanitario “fue fortalecido para enfrentar la pandemia”, con una inversión de más de $22.000 millones o unos $64.000 por paciente.
En lo que respecta al equipamiento se compraron 19.809.344 en kits de protección personal; 9.243.600 de barbijos N95 y 13.322.769 en barbijos descartables. También adquirieron 1.221 respiradores, siendo éstos uno de los aparatos de mayor demanda en la provincia.
Además entre las camas para terapia Intensiva y las intermedias se sumaron 2.500 al sistema bonaerense. ¿Por qué fue tan importante sumar camas? Actualmente, de las 36.226 cupos hospitalarios, 17.396 están ocupados, es decir el 48%. De ese porcentaje el 35% son pacientes contagiados por COVID. El sistema de salud viene resistiendo producto, entre otros aspectos, de las políticas implementadas y de la cuarentena.
FUENTE : el destapeweb